Luis Mario Herrera, nutriendo el movimiento ciudadano
IRIDISCENCIA
Carito Martínez
Luis Mario Herrera ha dado un gran paso entre los jóvenes adultos, desde el primer momento que se involucró en el partido Movimiento Ciudadano pudimos darnos cuenta que su actuar es con total profesionalismo y por consiguiente, sus resultados han sido favorables, a tal grado que ahora es el Secretario General del partido naranja.
Supo dar y cerrar el ciclo de aquel muchacho líder juvenil encargado de generar estructura estatal para MC y convertirse en uno de los grandes cuadros de la máquina naranja en Sonora.
A él le corresponde supervisar que todo lo interno de MC esté perfectamente alineado, es decir, que todos los coordinadores, la comisión operativa y los órganos de dirección sepan cual es la estrategia a implementar y que, a su vez, estos se mantengan en armonía.
Sin duda alguna Manuel Scott hizo bien en escuchar el consejo de Charly León y encomendar a Luis Mario Herrera este gran encargo, siendo así que desde septiembre Luis Mario cumple con este papel organizando los eventos más importantes del partido como la Coordinadora Ciudadana Estatal (la asamblea donde Scott tomó protesta).
Actualmente, Luis Mario, como Secretario de Acuerdos encabeza a todas las secretarías que están en MC como Derechos Humanos con Daniel del Sol; Fomento Deportivo liderado por Rogelio Cota; Vinculación y Participación abanderado por Carmen Palacios; Participación Política con Noel Medina, entre otros estén funcionando, asimismo con los movimientos que encabeza Rebeca Gutiérrez (jóvenes) y Denise Navarro (mujeres) apoyando a que sus ideas y planes de acción concuerden y marchen al pie de la letra de manera transversal conforme a los ideales de Movimiento Ciudadano.
Se ve que Luis Mario Herrera está disfrutado mucho de este nuevo reto político, pero al mismo tiempo no se olvida que la principal bandera de su partido consiste en que sea conformado por ciudadanos y podemos apreciar en sus redes sociales que Herrera mantiene balanceadamente su vocación en la nutrición con su pasión en la política.
Se puede apreciar también que Luis Mario Herrera es un perfil fresco, activo y abierto a la innovación, pero sobre todo a hacer cosas diferentes, alguien no ciclado únicamente en el ambiente de la política.
Por otra parte, se podría considerar que Movimiento Ciudadano, en comparación de años anteriores, actualmente se encuentra en su mejor momento en el Estado ya que se podría estimar como un partido que está creciendo bastante y resulta ser una opción atractiva para las nuevas generaciones que no se sienten identificadas con la ideología de otros partidos nuevos o tradicionales.
Por dicha razón, la responsabilidad de Luis Mario se vuelve más interesante, ya que después de la salida de María Dolores del Río y la declinación electoral de Ricardo Bours, MC había quedado sumamente golpeado y fracturado en Sonora.
Evidentemente en estos últimos meses después de las elecciones, hicieron su trabajo de reflexión y analizaron lo que sí y lo que no funcionó, por eso mismo, ahora le toca a Luis Mario supervisar que el sistema naranja siga funcionando de manera balanceada en Sonora para que se aprecie como un partido político nutrido, organizado y con bases sólidas, fortaleciendo sus estructuras tanto internas como externas.
Sin duda, hablando metafóricamente, movimiento naranja estaba bastante estreñido y con fuertes dolores de estómago, podríamos decir que tener un nutriólogo como segundo al mando les ha ayudado bastante a crecer de una manera, ahora sí, organizada, con una “dieta” y rumbo fijo, basados en un plan de acción, estableciendo los sustentos para el tan anhelado crecimiento y desarrollo de la estructura territorial, trabajo del cual se encargará Daniel Delgado, Rogelio Cota, Daniel Heraldes y otros actores políticos en los diferentes municipios.
Tendremos que estar muy al pendiente de cómo sigue evolucionando Movimiento Ciudadano en el estado y el nutriólogo Luis Mario Herrera, que por lo visto, mantener saludable y bien nutrido a MC es su principal objetivo, a tal grado que casi casi podríamos decir que el partido naranja es como si fuese su paciente predilecto.
