La OMS Declara el Brote de Mpox en África como Emergencia Sanitaria Mundial
Ginebra, Suiza.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el brote de mpox, anteriormente conocida como viruela del mono, en África como una emergencia sanitaria mundial. Esta decisión fue tomada tras la propagación de una cepa más mortal del virus, conocida como clado Ib, a cuatro provincias africanas previamente no afectadas, lo que ha generado una preocupación internacional.
El comité de emergencia de la OMS, conformado por expertos independientes, se reunió de manera virtual para evaluar la situación y asesorar al director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. Tras esta consulta, se decidió declarar una emergencia de salud pública de importancia internacional, el nivel más alto de alarma bajo el derecho sanitario internacional. Esta medida se aplica a «eventos extraordinarios» que representan un riesgo significativo para la salud pública a nivel global y que pueden requerir una respuesta coordinada entre los países.
El brote de mpox ha afectado a más de 17,000 personas en 13 países africanos desde principios de este año, con más de 500 muertes reportadas. La mayor concentración de casos se encuentra en la República Democrática del Congo, que ha registrado el 96% de los casos confirmados.
La mpox es una enfermedad viral altamente contagiosa, que se propaga a través del contacto cercano, tanto entre personas como con animales infectados. Los síntomas incluyen fiebre, sarpullido doloroso, dolor de cabeza, dolor muscular y de espalda, poca energía y ganglios linfáticos agrandados.
Este brote ha provocado que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de África también declaren una emergencia de salud pública de seguridad continental, marcando la primera vez que se emite una declaración de este tipo desde la creación de la agencia en 2017.
La OMS ha instado a la comunidad internacional a cooperar en la financiación y organización de esfuerzos para contener el brote. Un plan de respuesta regional ya está en marcha, con una inversión inicial de 1,45 millones de dólares liberados del Fondo de Contingencia de la OMS para Emergencias.