Familias de Etchojoa viven bajo el riesgo constante de ataques de abejas
Etchojoa, Sonora.- El municipio de Etchojoa atraviesa por una situación alarmante: más de 200 personas han sido víctimas de ataques de abejas en lo que va del año, en una crisis sin precedentes. Durante el último mes, al menos 70 personas fueron atacadas, desde niños hasta adultos mayores, y lamentablemente, un hombre perdió la vida.
Reinaldo Amarillas Meza, comandante de los Bomberos de Etchojoa, informó que el número de reportes relacionados con la presencia de panales de abejas ha alcanzado niveles nunca antes vistos. Actualmente, los socorristas atienden entre 35 y 40 llamadas por semana, lo que equivale a un promedio de cinco salidas diarias.
«Ahorita estamos atendiendo entre 35 a 40 salidas por abejas a la semana, esto no es normal, nunca había pasado… Es demasiado y están súper agresivas, ya nos tienen todos picoteados a los elementos de Bomberos», afirmó Amarillas Meza, destacando la peligrosidad de la situación.
Los vecinos de la localidad de Basconcobe también han denunciado la creciente presencia de panales, como es el caso del plantel CBTA 97, donde se reportan al menos siete panales que ponen en riesgo a los estudiantes.
María, vecina de la localidad, compartió su preocupación: “Cada día se ven más abejas, afortunadamente son pasajeras, pero algunas hacen su panal. Por ejemplo, en la prepa de mi hijo hay más de siete y si no se retiran, pueden provocar algún accidente”.
La sequía, un factor clave
El aumento en los reportes de abejas, de acuerdo con Amarillas Meza, está relacionado con la sequía en el Valle del Mayo, que ha afectado a los cultivos y los riegos. Ante la falta de flores y agua, las abejas han comenzado a buscar refugio en patios de hogares, escuelas y establecimientos del municipio.
«La sequía es la principal causa. No hay flores, no encuentran riegos, y buscan refugio en algún lugar fresco, por lo que se van a los patios de los hogares o escuelas», explicó Amarillas.
Las autoridades recomiendan no molestar a las abejas ni intentar ahuyentarlas con agua, piedras o golpes, ya que esto podría desencadenar un ataque.