Francisco Estrada, un ejemplo de lucha y esperanza en busca de empleo
Navojoa, Sonora. Con 27 años de edad y una discapacidad visual que le ha arrebatado el 90% de su visión, Francisco Estrada continúa enfrentando las adversidades con optimismo y una actitud inquebrantable. Sin embargo, la búsqueda de empleo formal ha sido un camino lleno de obstáculos, marcado por respuestas como: “Nosotros te llamamos”, que han puesto a prueba su resiliencia y paciencia.
A través de sus redes sociales, Francisco hizo un llamado para encontrar una oportunidad laboral:
“Tengo muchas ganas de salir adelante. Soy responsable, tengo buena actitud y sólo pido paciencia”, expresó con esperanza.
Un emprendedor con grandes sueños
En meses pasados, Francisco emprendió un negocio de snacks y raspados en el fraccionamiento La Joya, donde reside. Aunque inicialmente tuvo buena aceptación, la necesidad de un ingreso más estable lo llevó a buscar un empleo formal que le permita sentirse útil y seguir construyendo su futuro.
Entre sus habilidades, Francisco destaca su capacidad para crear spots publicitarios, además de poder desempeñarse como recepcionista o en actividades que requieran compromiso y responsabilidad.
“Gracias a Dios puedo hacer las cosas; sólo necesito una oportunidad para demostrarlo”, enfatizó.
Fe y perseverancia frente a la adversidad
A pesar de las dificultades, Francisco asegura que su fe en Dios lo impulsa a seguir adelante, aunque admite que a veces se pregunta por qué enfrenta esta situación:
“Se me vino esta enfermedad y digo por qué yo, pero sólo Dios sabe por qué. Tengo ganas de salir adelante”.
Un llamado a la inclusión laboral
El caso de Francisco resalta la necesidad de que las empresas y organizaciones en Navojoa y en todo el país promuevan la inclusión laboral, brindando oportunidades a personas con discapacidad para demostrar su talento y contribución a la sociedad.
El ejemplo de Francisco es un recordatorio de que las limitaciones físicas no definen el valor de una persona. Su actitud positiva y su esfuerzo son inspiración para muchos, mientras sigue esperando que alguien le dé la oportunidad que tanto desea.