Greta Thunberg acusa a Israel de “genocidio” tras ser deportada por intentar llevar ayuda humanitaria a Gaza

París, Francia.– La reconocida activista ambiental sueca Greta Thunberg denunció públicamente a Israel por lo que calificó como un “genocidio en Gaza”, luego de haber sido detenida y deportada tras intentar ingresar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza como parte de la Flotilla de la Libertad.

Thunberg, de 21 años, viajaba en el barco Madleen, junto a otros activistas internacionales, cuando la nave fue interceptada por las fuerzas israelíes en aguas internacionales. Israel argumentó que la embarcación violaba el bloqueo naval impuesto sobre el enclave palestino.

«Nos secuestraron en aguas internacionales»: Greta Thunberg

En declaraciones realizadas durante una escala en París, Thunberg acusó a las autoridades israelíes de cometer un acto ilegal al detenerlos fuera de las aguas territoriales israelíes, llevándolos por la fuerza a Israel. Aseguró que fueron retenidos dentro del barco sin poder desembarcar ni contactar libremente con el exterior.

“La verdadera historia no es nuestra detención, es el genocidio en Gaza. No podemos desviar la atención de eso”, expresó con firmeza.

La activista señaló que su situación no es comparable con el sufrimiento de los civiles palestinos, e hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para que no se limite al reconocimiento del Estado palestino, sino que actúe para detener la catástrofe humanitaria en curso.

Thunberg fue deportada a Suecia, pero otros ocho activistas permanecen detenidos, entre ellos la eurodiputada Rima Hassan y el español Sergio Toribio, todos en la prisión israelí de Givon en espera de una resolución judicial.

Críticas al bloqueo y denuncias por violaciones al derecho internacional

Israel mantiene que el bloqueo marítimo es una medida de seguridad necesaria para evitar el ingreso de armas a Gaza. Sin embargo, organizaciones humanitarias e instancias internacionales han cuestionado la legalidad y los efectos de ese cerco, argumentando que impide el acceso a insumos básicos como alimentos, medicinas y combustible, afectando a más de 2.1 millones de personas que viven en el enclave.

La organización Adalah, que asesora legalmente a los activistas de la Flotilla, denunció que la intercepción del barco fue ilegal, ya que ocurrió en aguas internacionales, lo que constituiría una violación al derecho internacional marítimo.

El incidente ha reforzado el posicionamiento de Thunberg más allá del activismo climático, sumándose ahora a las voces globales que exigen justicia para el pueblo palestino, en medio de una crisis humanitaria que sigue cobrando vidas día a día.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *