Termina la efervescencia, no la opción para el futuro; no hay certificados de impunidad y buscan pruebas de irregularidades; Contraloría le baja al discurso incendiario; Hay denuncias de Padrés contra Claudia; bajo la lupa asalto a Lizárraga y auditoría a Playa Incluyente; a preparar el Carnaval… de 2023
Estas líneas…
Agustín Rodríguez L.
GUAYMAS, Son.- Con la semana terminaría la polvareda levantada por el nombramiento de Claudia Pavlovich como futura integrante del Servicio Exterior, no así el proceder de su sucesor, si fuere el caso.
El resumen podría centrarse en la advertencia del actual guía político de Sonora: “yo no estaría tan seguro de que, la decisión presidencial de mandar a Claudia Pavlovich a Barcelona, sea un certificado de impunidad para quienes hayan cometido delitos contra el erario”.
Antes bien, Alfonso Durazo se dijo “más obligado que nunca” a instruir a sus colaboradores a presentar pruebas que acrediten la comisión de esos delitos.
Pero faltaba algo para el remate, por eso pidió a su contralor, Guillermo Noriega, ventilar 172 auditorías emprendidas para confirmar la veracidad de tanto señalamiento hecho en campaña, tan útil al final de cuentas, para el holgado triunfo morenista en la elección pasada.
Lo hizo, “El Memo”, pero con pies de plomo. No hubo discurso incendiario ni queja sobre funcionarios convertidos en Creso a costa de empobrecer a los sonorenses. El contralor prefirió resaltar el respeto al debido proceso para evitar la caída de casos –hace bien, al sexenio pasado se le cayeron todos–, y que no van contra “actores políticos determinados”.
Es decir, no van sobre personas, sino por procesos, lo cual de momento enfría ánimos en gayola, que espera ver sangre en el ring político actual. Noriega prefirió escudarse en una opinión pública interesada en saber si hubo o no las raterías adjudicadas al sexenio fenecido el pasado octubre.
Ir por los saqueadores señalados en campaña, hoy fue “necesidad de realizar procesos estrictamente administrativos e institucionales buscando resultados que lleven a la rendición de cuentas”. No a ataques públicos y mediáticos, sí al estricto apego a la ley y a los derechos humanos si el resultado envía a servidores públicos a instancias judiciales.
Hizo recordar al anterior contralor, Miguel “El Ronco” Murillo, cuando tardaba en llamar a cuentas a los padrecistas perseguidos por los “Claudilleros” y decía querer evitar una detención por la mañana y verse obligado a soltarlos por la tarde.
No pudo. Persiguieron, encarcelaron y, como el Memo Noriega cuestionó: ¿cuántas personas están en la cárcel al día de hoy después de la persecución que vimos hace 6 años? ¿Cuántos casos se sostuvieron a lo largo del tiempo, después de un ejercicio mediático importante o de información excesiva?
El caso es, desde el primer día, este sexenio audita a todas sus dependencias, como es obligado. Al parejo, modifica mecanismos legales para alargar tiempos de prescripción a faltas cometidas por servidores públicos y no se pierda la rendición de cuentas.
Una pregunta alusiva al tema de la semana –el nombramiento de Claudia—, fue si un nuevo cargo da impunidad a un servidor público. Así contestó:
“No, no. La respuesta es no. Ningún –y lo voy a repetir–, ningún cargo público, ya sea en el Servicio Exterior del gobierno federal o en las Naciones Unidas te va a dar inmunidad a un proceso de rendición de cuentas. Ninguno. No es, ningún cargo, un blindaje para la rendición de cuentas y si es hasta donde tengamos que llegar, llegaremos”.
Atrajo la promesa del gobernador Durazo de crear la Unidad de Inteligencia Financiera en Sonora, para agilizar el rastreo del dinero público y la fiscalización. La habrá, pronto, y estará enlazada con la UIF federal. Así las cosas.
De paso: las principales denuncias contra Claudia Pavlovich, las interpuso y ratificó el ex gobernador Guillermo Padrés ante la Fiscalía Anticorrupción, por abuso de autoridad e incumplimiento de un deber legal. Incluyó al exfiscal Rodolfo Montes de Oca y el exsecretario de Gobierno, Miguel Pompa Corella.
Pero existen otras 18 denuncias similares contra exfuncionarios –destacan los de Salud e ISSSTESON–, interpuestas el pasado 8 de octubre en la Agencia 2ª. Especializada en Hechos de Corrupción.
PENDIENTES PREOCUPANTES
Guaymas espera pronta aclaración de dos cosas:
1.- La cereza que coronó el pastel de la corrupción del trienio pasado, la “Playa Incluyente” San Carlos. Existe un expediente con nombres de beneficiarios y demás detalles de la tranza con dinero público, lo cual facilitará al ISAF cumplir el exhorto hecho por el Congreso del Estado para poner en el banquillo de los acusados a Sara Valle y cómplices.
2.- El intento de asalto y amenazas al exdiputado local Rodolfo Lizárraga. Crece la especulación sobre motivos distintos al allanamiento de su domicilio en “El centinela”.
SIN CARNAVAL
Al cancelarse el Carnaval 2022, el Ayuntamiento de Guaymas anuncia que el recurso disponible esta vez, se usará en obra pública para mejorar la imagen de la ciudad.
La alcaldesa Karla Córdova ofrece iniciar ya preparativos para 2023, con eventos previos hasta llegar a un resultado cercano al esplendor que alcanzaba la fiesta en el pasado.
La idea se apega al criterio de quienes aman esta convivencia que data de 1888, cuando participaba toda la sociedad e invitados internacionales, pero los últimos años solo se improvisó y centró en vender alcohol, con el obvio y negativo resultado a que ello conlleva.
