La pésima estrategia de Gildardo Real para limpiar al PAN
En últimas fechas el nuevo dirigente del Partido Acción Nacional en Sonora, Gildardo Real Ramírez ha emprendido una estrategia que gira alrededor de la demanda a la ex gobernadora Claudia Pavlovich por supuesto peculado y desvío de recursos por 8 mil millones de pesos durante su sexenio.
Según el propio presidente del PAN Sonora, Gildardo Real, la intención de esta agenda política del partido es que estos actos no queden impunes, exigiendo la inhabilitación de la ex mandataria y recientemente sumaron la petición de juicio político en la cámara de diputados.
El eje rector de la nueva dirigencia panista es lograr que la justicia someta juicio a la ex gobernadora Claudia Pavlovich, pero sobre todo es la campaña mediática de ataques, lo cual, en mi particular punto de vista, es una pésima estrategia de Gildardo Real para limpiar al PAN tratando de ensuciar a su reciente aliado electoral y muy probablemente el próximo también, el PRI.
Dejando fuera la evidente hipocresía, oportunismo y poca vergüenza del dirigente del PAN, al haber sido uno de los principales operadores del gobierno estatal del PRI en la pasada legislatura del Congreso, el panista prácticamente está escupiendo para arriba. Nadie olvida que Gildardo como diputado, aprobó sin rubor alguno, todo lo que el Ejecutivo enviaba al Congreso. ¿A cambio de qué?.
Primeramente, en el tema político electoral, Gildardo Real con mucho tiempo de anticipación está poniendo en riesgo la posibilidad de una alianza para tratar de hacerle frente a Morena en 2024, aun cuando la agenda política del PAN a nivel nacional sigue de la mano del PRI.
En el tema mediático, esta andanada que el dirigente panista ha apuntado a la ex gobernadora, obedece sin lugar a dudas, al pago de facturas políticas. Hay que tener presente que Gildardo Real, para ganar la presidencia del PAN en Sonora, pactó con el ex gobernador Guillermo Padrés, quien le dio los votos para su triunfo ante los Munro y su alfil Humberto Souza.
Vaya doble discurso. Tiene como aliado a un ex gobernador que estuvo preso por delitos de fraude. Ahora, como todo un paladín, demanda penalmente a la ex gobernadora y promueven juicio político, cuando es de sobra conocido que en la relación Gildardo Real (diputado) y Claudia Pavlovich (gobernadora) todo era Pay Per View.
De notar la trayectoria de intereses, traiciones y deslealtades que ha dejado Gildardo Real. Traicionó a su mentor Héctor Larios; posteriormente, le jugó las contras a Javier Gándara; luego hizo alianza con Beltrones (recuerden la foto del café en 2019) y ahora a la ex gobernadora, quien le dio concesiones, además de permitirle charolear y litigar asuntos en diversas dependencias y tribunales.
¿Involuntariamente? Gildardo Real en solo un mes logró enlodar no solo a su partido sino al priismo de la región, creando rumbo a una complicada aduana electoral de 2024 la percepción de tener en la entidad como oposición al PRI de Pavlovich y el PAN de Padrés.
Es evidente que la oposición está moralmente derrotada, pero pareciera que en vez de salir del hoyo cada vez cavan lo hacen más profundo, ¿no hay nadie en Acción Nacional que adopte la estrategia de kamikaze contra Morena, el PRI o lo que se mueva no le abona en nada?.
En resumen, Gildardo Real con su reciente arranque de decencia, que terminará en pura simulación, está poniendo en riesgo la necesaria alianza, pero también está generando una percepción muy negativa de ambos partidos al ligarlos con los ex mandatarios de Sonora.
Si la idea es quedarse cada vez con menos militantes y que la gente no vote por ellos, van muy bien; pero si la estrategia es generar simpatía en la ciudadanía y representar una opción real para el electorado, creo que están haciendo todo lo contrario. Tiempo al tiempo.
Politizan proceso de designación del ISTAI
La convocatoria y proceso de designación para los nuevos consejeros del Instituto Sonorense de Transparencia y Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales (ISTAI) se ha envuelto en una serie de señalamientos de principio a fin.
Primeramente, con el supuesto acuerdo para la llegada de Guadalupe Taddei, ex consejera presidenta del Instituto Estatal Electoral de Sonora. Este caso se analizó y se concluyó con anticipación, que en su participación y caso de resultar electa, no tendría ningún impedimento legal.
Incluso en la etapa de entrevistas que contempla la convocatoria, Guadalupe Taddei demostró conocimiento y experiencia en el tema. Con ello se legitimaba su inminente llegada al ISTAI y dejaba atrás suspicacias que pudiera generar su reciente paso por el órgano electoral.
Así mismo, se supera la etapa más difícil del proceso, en ese momento, aunque el fantasma de la simulación seguía rondando por el Congreso. Pero el pasado miércoles el dictamen de la comisión de Transparencia del Congreso, encargada de este proceso, fue la gota que derramó el vaso.
Se aprobó el proyecto de dictamen para subir al pleno el día jueves los nombramientos de las y los consejeros propietarios del ISTAI.
Como presidenta por un período de siete años Guadalupe Taddei Zavala; como consejera por un período de cinco años Ana Patricia Briceño Torres y como consejero por un período de tres años, Wilfredo Román Morales Silva.
Esto, después de entrevistar a 42 aspirantes y revisar el cumplimiento de las bases de la convocatoria, así como sus antecedentes personales y profesionales.
De nuevo la polémica surge por la designación de Ana Patricia Briseño, por la supuesta violación del artículo 5 y el apartado G de la convocatoria que dicta: “No haber ocupado un puesto de elección popular, no haber sido presidenta de un partido o agrupación política o ministro de culto religioso.”
Sin embargo, Ana Patricia Briseño es suplente de la diputada del PT, Diana Karina Barrera, quien es diputada electa por la vía plurinominal. El argumento legaloide argumenta que al no hacer efectiva la suplencia no violenta ningún artículo de la convocatoria, e interpretan la ley a conveniencia.
Es evidente que Ana Patricia Briseño fue electa a un puesto de elección popular, representa a un partido y a un grupo político, con intereses políticos. Ante los ojos del ciudadano común es evidente que hay conflicto de intereses, un diputado propietario está votando por su suplente para ser consejera. Aunque esta se ausentó de la votación.
Con esta imposición no solo se politiza, sino que mancha este proceso de designación y simulación del ISTAI, deslegitima a todos los consejeros. Creo yo innecesariamente.
¿Es requisito tener experiencia electoral para ser comisionado?: totalmente. No solamente la experiencia en materia electoral, sino incluso haber participado en el proceso electoral como candidatas plurinominales. Guadalupe Taddei y Ana Patricia Briseño fueron colaboradoras en el IEE Sonora y hoy lo serán en el ISTAI, de lo electoral a la transparencia.
Y ojo, no estoy poniendo en tela de juicio la capacidad de ambas consejeras, incluso las dos cuentan con un currículum impresionante. Lo que sí estoy cuestionando son que privilegian los acuerdos políticos por encima de una designación transparente y fuera de la ley.
No se necesita indagar mucho para ver quién está detrás de la imposición de Ana Patricia Briseño y a qué intereses obedece y obedecerá.
Vámonos al día jueves en el pleno del Congreso, ¿cómo puede ser posible que se cree más debate en la instalación en el pleno del Congreso las letras doradas de Luis Donaldo Colosio Murrieta, que la designación de los consejeros del ISTAI?
Y, ¿cómo puede ser posible que dure el mismo tiempo la exposición del dictamen, que el desahogo de las impugnaciones y observaciones del proceso?. Usted tendrá la mejor respuesta.
Lo cierto es, que los comisionados en estos órganos “autónomos”, gozarán de una jugosa beca, que supera los 100 mil pesos mensuales, más prestaciones, bonos y viáticos, etc. En pocas palabras, ganarán más que el Presidente de la República. Y en palabras del Ejecutivo Federal, dichos órganos, no sirven para nada y son mera simulación.